Gestión de crisis

La resolución de una crisis empresarial desde el Consejo

Para elaborar este artículo, nos hemos nutrido de las líneas maestras del informe que el Instituto de Auditores Internos ha publicado recientemente con el título de Cómo supervisar una crisis paso a paso. Una de las claves que articulan el estudio es que la comisión de auditoría debe, como siempre, mantenerse totalmente imparcial para poder informar al Consejo y asesorarle, con autonomía y con el criterio que consideren más adecuado para gestionar la acción, acerca de cuál es la mejor estrategia para resolver la crisis empresarial. A continuación, compartimos una serie de funciones, preguntas y reflexiones de calado (cruciales en el informe) que la Comisión de Auditoría debería establecer con los auditores internos para supervisar una crisis empresarial de la manera más eficaz.

Para manejar de manera adecuada una crisis empresarial, la Comisión de Auditoría debe sintonizar con el auditor interno para sincronizarse y funcionar con él como el mejor aliado. Ese trabajo en equipo será capital para que la comisión ofrezca eficientemente sus labores de asesoramiento al consejo, al tiempo que efectúa la labor de supervisión de la eficacia de los controles y sistemas de gestión de riesgos, así como de la integridad de la información financiera.

La función que cumple la Comisión de Auditoría en una gestión óptima de crisis 

La Comisión de Auditoría desempeña un ejercicio esencial en el manejo de todas las etapas de la crisis empresarial. Sus componentes deben estar muy centrados en sus responsabilidades, informados sobre la evolución de los acontecimientos y también serán reportados con detalle acerca de la gestión, conforme mantienen un diálogo fluido y constructivo con toda la organización, especialmente con el Auditor Interno y el Auditor de Cuentas.

Para salvaguardar la integridad de la información financiera, la Comisión de Auditoría requiere tener acceso a toda la información importante, particularmente sobre los escenarios, los impactos y la gestión de los riesgos más sensibles: operacional, de liquidez, tecnológicos, proveedores, compliance y riesgo reputacional.

Cinco pasos cruciales para manejar con acierto una crisis empresarial 

A continuación, se detallan una serie de estrategias que permiten atajar una crisis, superarla y extraer los aprendizajes adecuados para salir fortalecidos de esa situación.

  1. Responder a la crisis empresarial en todos los frentes, de una manera integral.
  2. Adoptar medidas para preservar el negocio y la operativa.
  3. Reversión. Desarrollar el plan para regresar a la nueva normalidad.
  4. Reinvención. Identificar qué nuevas tendencias va a traer consigo la crisis.
  5. Anticiparse al nuevo entorno socioeconómico, sectorial y regulatorio.

Principales funciones que estructuran la conducta de un auditor interno

Antes de la crisis: auditar el plan de contingencia y continuidad de negocio. La idea es que el auditor analice todos los aspectos  para calibrar su consistencia y el grado de planificación que vertebra el negocio en los diversos escenarios de futuro. A partir de las mejoras que se introducen en el plan de negocio, el reto es testearlo periódicamente con distintos escenarios e identificar sugerencias de mejora.

Durante la crisis empresarial: el auditor interno aporta un apoyo crucial con su mirada transversal. La supervivencia de la organización puede estar en juego durante días, semanas o incluso meses, por eso es tan importante que durante ese periodo de tiempo el auditor interno ejercite sus dotes de observación, capacidad analítica y, llegado el momento, de ejecución. Dicho de otra manera, llegará un momento en el que el auditor deberá “quitarse el gorro” de tercera línea, propio del asesor, y asumir un rol más centrado en el control interno, una función crítica durante el manejo de la crisis. En suma, su perfil analítico y su mirada transversal le convierten en un profesional válido para muchas tareas. Por ejemplo, debe aportar sugerencias de valor para que sean tenidas en cuenta por el comité de crisis. Además, identificar los mayores riesgos y prioridades de la situación. En suma, debe ser un asesor de confianza en tiempo real. También comprobar los impactos de la crisis, así como la fiabilidad de la información financiera. Al tiempo que aporta su conocimiento y experiencia en las revisiones post-crisis, que incluyen aspectos como ciberseguridad, cumplimiento normativo o impacto en los objetivos estratégicos y financieros.

Después de la crisis, debe volver a desempeñar su papel: en esta fase, su rol jugará un papel activo en la elaboración de las auditorías, al tiempo que se afina en aspectos como el análisis de la gestión de la crisis, la consistencia y flexibilidad de la cadena de suministro, medidas en la seguridad laboral y, de nuevo, maneras de afinar en los objetivos estratégicos y financieros.

Preguntas que deben guiar los procedimientos de un auditor interno

El auditor interno tiene la ventaja de estar cerca del comité que gestiona la crisis empresarial, en muchas ocasiones también recibe información de primera mano. De manera que es un stakeholder acreditado para asesorar con la adecuada perspectiva y criterio a la Comisión de Auditoría. A continuación, extractamos las siete preguntas claves que deben guiar su proceder en la labor de apoyo que ofrece a la comisión.

  1. Cuáles son las primeras amenazas para el negocio.
  2. ¿Cuál es el impacto económico esperado y qué medidas se han tomado para preservar la liquidez y la cadena de suministro?
  3. ¿Se contemplan medidas para cambiar costes fijos en estructuras variables?
  4. ¿Se han identificado adecuadamente las áreas contables que sufrirán los impactos más significativos?
  5. ¿Hay cambios en el perímetro y otras circunstancias que ofrecen el valor razonable de los activos y pasivos financieros y no financieros e intangibles?
  6. ¿Ha detectado el auditor interno alguna deficiencia relevante en los sistemas de control interno?
  7. ¿En qué forma, medida y horizonte creen que será necesario que la compañía se replantee su estrategia y modelo de negocio?

Diligent y la comunicación fluida entre departamentos internos y externos

En Diligent contamos con varias soluciones que permiten que la información fluya sin problemas entre departamentos internos y externos, con garantías de seguridad. Para contar con una fuente de información única de la información de la empresa y todas sus entidades, Diligent ha concebido su herramienta Entities. Este instrumento centraliza los datos de su empresa, al tiempo que simplifica los procesos legales y financieros para garantizar el cumplimiento de la legislación local e internacional.

Por otro lado, una vez el auditor interno ha accedido a la fuente única de información empresarial, puede compartir sus conclusiones con la Comisión de Auditoría gracias a Diligent Boards. De este modo, la Comisión de Auditoría podrá a su vez mantener informado al Consejo.

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